I'm still in love with you

Lo había dejado con él desde hacía sólo tres días y ahora su hermano, el que tantas veces los había visto juntos viviendo sus momentos, haciendo suyo cada rincón del planeta, le estaba proponiendo otro juego. No quería hacerlo, no quería aceptarlo. Mejor dicho, aún no le había olvidado. Cada recuerdo se consumía en su interior como cenizas a merced del viento, cada beso, cada abrazo...aún seguía notandole en cada poro de su piel, su cerebro aún se negaba a aceptar que tenía que empezar una historia nueva sin él, sin sus dulces caricias. Le quería, seguía queriéndole como el primer día. Entonces ¿porqué le había dejado? No paraba de preguntárselo a sí misma. Daba vueltas por su habitación, aún con el móvil en la mano observando aquel maldito mensaje que la había hecho dudar más aún. Aquel mensaje que la citaba en la cafetería en la que habían compartido tantos secretos, miradas y sonrisas. Pero esta vez él no estaría, sólo estaría su hermano. No podía hacerle eso a él y a sí misma tampoco. Todavía seguía enamorada de él así que, marcó su número y esperó a que contestase. Esa suave y cálida voz de nuevo. Un escalofrío le recorrió el cuerpo. Lo único que pudo hacer fue decirle 'Sigo enamorada de tí' y luego colgar. Le había llegado otro mensaje, sólo contenía unas cuantas palabras, pero eran las palabras que había estado esperando. 'Yo también, no quise decirte adiós tan pronto así que, ¿lo intentamos de nuevo?'. No dudó al formular la respuesta.  

Entonces se dio cuenta de que, nunca había querido dejarle realmente. Le necesitaba para seguir adelante, en otras palabras, necesitaba un motivo por el cual salir de la cama cada día.