viernes, 30 de diciembre de 2011

But my reason is you.

No es que te culpe de mis errores, pero tampoco de mis victorias. No es que quiera echarte en cara todo lo que me molesta de ti, o lo que no soporto que hagas, tampoco es que quiera un universo paralelo en el que todo sea perfecto como yo quiero. Porque es imposible. No puedo culparte de nada, porque no tienes la culpa, no puedo echarte en cara todo lo que me molesta de ti, porque no hay nada que echar en cara, no puedo decirte que quiera un universo paralelo en el que todo sea perfecto y como yo quiero porque, a tu manera, ya lo haces posible. Tampoco puedo decir que mis sueños no se hayan cumplido, al menos casi todos, porque se están cumpliendo ahora mismo, mientras me miras escribir y me sonríes. No es que pueda decir que no tengo razones para creer que la vida de alguien puede cambiar y dar un giro de 180º, porque sería mentir descaradamente, y es que sí que puede, una vida puede cambiar por un motivo. Ya sea un accidente, una persona, una muerte, una vida nueva, un amor de una noche...por un millón de cosas diferentes. Hay cientos, miles, millones de razones para que una vida cambie por completo, es cierto.




Pero mi razón, eres . 

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